Ahora que Bitcoin ronda los 100.000 $ y está en boca de todo el mundo, surge de nuevo la pregunta: ¿quién es Satoshi Nakamoto, el creador de Bitcoin?
Todo lo que sabemos es que el creador de Bitcoin se esconde bajo el seudónimo de Satoshi Nakamoto, pero no se sabe quién es en realidad. Podría ser una sorpresa más grande que la de Carmen Mola en el Premio Planeta 2021.
Parte del éxito de Bitcoin se debe al anonimato de su creador. En este artículo trataré de resolver el misterio de quién es Satoshi Nakamoto y qué consecuencias podría tener para la humanidad que se descubra o no su identidad. Porque, si crees que Bitcoin no va contigo porque no has invertido en él, estás muy equivocado.
¿QUÉ ES BITCOIN Y LAS CRIPTOMONEDAS?
Intentaré explicar qué son Bitcoin y las criptomonedas de forma que lo entienda hasta un niño. Las criptomonedas son monedas digitales, como las de los videojuegos, pero que se pueden usar para pagar tanto dentro como fuera del mundo digital.
Bitcoin es la primera criptomoneda y, por lo tanto, el valor de referencia para el resto: algo similar a lo que ocurre con el dólar y las demás divisas.
A diferencia del dinero institucional (fiat), Bitcoin es un sistema de pago que carece de bancos centrales y administradores únicos (bancos). Para confirmar las transferencias, se utiliza un grupo de verificadores voluntarios llamados mineros, quienes reciben una comisión por ese trabajo.
Mediante un software libre y de código abierto, todos los movimientos se registran en una base de datos pública: la blockchain (cadena de bloques). Esto impide el doble gasto o la falsificación de dinero e información. Bitcoin nunca se ha logrado hackear, y hacerlo resultaría tan costoso que, en términos económicos, es inviable.
Como curiosidad, se estima que hackear la red de Bitcoin tomaría 30.000 años y costaría 529.104e+8 millones de dólares.
Pero, aparte de sus maravillas tecnológicas, si algo ha hecho popular a Bitcoin y las criptomonedas ha sido su precio creciente. Esto se debe a una diferencia fundamental con el dinero institucional: es deflacionario.
Esto significa que su emisión está limitada desde el principio (en el caso de Bitcoin, 21 millones) y no se puede crear ni una moneda más. Esto lo convierte en un valor refugio frente a la inflación, como el oro.
Ahora que nos estamos acostumbrando a que la inflación se dispare y el coste de la vida suba, os contaré un secreto: no es el oro, Bitcoin o el pan lo que sube de precio, sino el dólar o el euro el que baja cada vez que se emite deuda pública o se imprimen nuevos billetes.
¿QUÉ SABEMOS DE SATOSHI NAKAMOTO?
Según él, es un japonés nacido el 5 de abril de 1975. Sin embargo, el hecho de que nunca haya publicado un mensaje en japonés y que su inglés parezca nativo hace sospechar que se trata únicamente de un seudónimo.
No se conoce nada de Satoshi Nakamoto fuera del mundo online. No sabemos si es hombre, mujer o una organización. Solo sabemos que inventó el protocolo de Bitcoin y lo publicó en un artículo científico en Cryptography Mailing List en octubre de 2008.
En 2009 publicó la primera versión del cliente de Bitcoin y colaboró con otros informáticos en el proyecto. Hacia finales de 2010, su presencia empezó a diluirse hasta desaparecer de manera tan misteriosa como su aparición.
El 23 de abril de 2011, escribió en un correo electrónico: “Me he pasado a otras cosas. El proyecto Bitcoin está en buenas manos con Gavin y el resto”. Las últimas transacciones salientes de su cartera principal datan de 2013. El resto de su dinero, 1,1 millones de BTC, no se ha movido, ni siquiera cuando Bitcoin alcanzó los 70.000$.
Esto nos deja tres posibles lecturas: está muerto, ha perdido las claves de su billetera o no le interesa el dinero. Las dos primeras hipótesis no entrañan ningún riesgo y aportan estabilidad al Bitcoin, pero la última debería preocuparnos, y mucho.
“Las habilidades para programar de Satoshi Nakamoto no eran convencionales y aplicaba pruebas de código distintas a las que podrías esperar de un ingeniero informático corriente”.
Jeff Garzik (desarrollador)
¿POR QUÉ SATOSHI NAKAMOTO, EL CREADOR DE BITCOIN, USA UN APODO?
Si quien está detrás de Bitcoin es una institución, la sola mención de su identidad podría generar desconfianza. Por el contrario, si Satoshi Nakamoto es una única persona, tiene muchos motivos para querer ocultar su identidad.
El primero sería huir del fenómeno fan y preservar su privacidad. El segundo es que revelar su identidad va en contra del principio de anonimato y descentralización de la moneda, al ponerle rostro a su creador.
Tampoco es desdeñable la idea de que lo haga para evitar problemas legales. Bitcoin puede ser utilizado por cualquier persona en cualquier lugar del mundo. El hecho de que algunos lo empleen para actividades ilegales podría causarle serios inconvenientes a su creador.
Además, los gobiernos de todo el mundo no ven con buenos ojos la creación de dinero fuera de los cauces institucionales. En Estados Unidos, ya ha habido personas que intentaron crear criptomonedas como alternativa al dólar y fueron víctimas de acciones legales.
¿QUÉ PERSONAS PODRÍAN SER SATOSHI NAKAMOTO?
Ante la pregunta: ¿Quién es Satoshi Nakamoto, el creador de Bitcoin?, surgen dos opciones: o es un grupo de personas o es una sola. Esta cuestión no es trivial, hasta el punto de que múltiples agencias de inteligencia dedican ingentes recursos a resolver este misterio. Aquí presentamos a varias personas que podrían ser el creador de Bitcoin.
Hal Finney
Un pionero en criptografía y videojuegos que trabajó mano a mano (online) con Satoshi Nakamoto. Antes de que existiera Bitcoin, creó el sistema de prueba de trabajo, que sería vital para el desarrollo de las criptomonedas.
Fue la primera persona en descargarse el programa cliente de Bitcoin (después de Satoshi) y en recibir una transacción de BTC del propio Nakamoto. Además, era vecino de Dorian Nakamoto, de quien se supone extrajo el apellido. Por si esto fuera poco, contrajo ELA y fue criogenizado en agosto de 2014, lo que podría explicar el progresivo mutismo de Nakamoto.
Nick Szabo
Una década antes de la aparición de Bitcoin, Nick Szabo publicó un trabajo sobre una moneda descentralizada llamada Bit Gold. Sin embargo, la incapacidad de encontrar una solución al problema del doble gasto y la persecución por parte de las autoridades terminaron con el proyecto. Años después, Szabo se uniría al proyecto Bitcoin.
Dorian Prentice Satoshi Nakamoto
Este hombre no solo estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado, sino que además tenía el nombre equivocado. O eso debió pensar cuando los medios de comunicación rodearon su casa para interrogarlo como el supuesto creador de Bitcoin.
Su apellido, sus estudios en física y su carácter libertario fueron esgrimidos como motivos para perseguir a este japonés-estadounidense. Sin embargo, la falta de pruebas y la aparición de mensajes en la red procedentes del verdadero Satoshi Nakamoto durante una de las entrevistas terminaron por poner fin a la persecución.
Craig Wright
Para quienes conocen el mundillo de las criptomonedas, pensar que Craig Wright es Satoshi Nakamoto es como decir que Pelé y Maradona son la misma persona.
Craig Wright es uno de los fundadores de Bitcoin Cash y ha intentado en repetidas ocasiones fundamentar que su moneda es el verdadero BTC, una de sus grandes ocurrencias fue hacerse pasar por el creador de Bitcoin. Esta búsqueda de publicidad lo ha llevado a los tribunales. Sin embargo, fue incapaz de probar que es Satoshi Nakamoto.
¿QUÉ ORGANIZACIONES PODRÍAN SER SATOSHI NAKAMOTO?
Sobre el papel, Bitcoin se creó para darle una mayor libertad financiera al pueblo frente al gobierno. Sin embargo, si en vez de un individuo lo hubiera creado una organización, esta podría tener otros fines. Entre los principales candidatos se mencionan la mafia, la CIA o PayPal.
La mafia
Junto con la volatilidad, el otro gran argumento que han esgrimido los detractores de Bitcoin ha sido su uso para actividades ilegales. Aunque la mayoría de estas actividades se realizan con dólares, es cierto que el anonimato de Bitcoin lo hace muy útil para estos fines.
En la Dark Web abundan páginas donde se pueden comprar drogas y armas con criptomonedas, lo cual plantea la posibilidad de que la mafia sea Satoshi Nakamoto.
El inconveniente de esta teoría es que la propia transparencia de la blockchain permite que, una vez atrapados los dueños de una cuenta, puedan rastrearse todas sus transacciones. Esto constituye una prueba incriminatoria en un juicio.
La CIA o la NSA
Rara es la conspiración en la que no aparece la CIA o la NSA. Los intereses de estas agencias para crear Bitcoin podrían ser diversos: mantener el control de Estados Unidos ante un posible retroceso del dólar o de la economía estadounidense, financiar a grupos insurgentes en terceros países o rastrear delincuentes.
EL FMI
Resulta irónico que el FMI apoye el dinero digital respaldado por gobiernos cuando, históricamente, han atacado el carácter anárquico y descentralizado de Bitcoin. Estas monedas digitales gubernamentales podrían crear un mundo orwelliano en el que los estados tendrían un control total sobre el uso que los ciudadanos hacen de su dinero.
La desaparición del dinero físico nos abocaría a una sociedad sin privacidad de ningún tipo. Si bien esto acabaría con el dinero negro, también permitiría a los gobiernos retirar la financiación a cualquier persona u organización que se opusiera a ellos o los criticara. Así, el paso de una democracia a una dictadura sería extremadamente sencillo.
¿Cómo aceptamos entonces la imposición del dinero digital? Aquí es donde Bitcoin podría desempeñar un papel clave: si los pioneros de las criptomonedas se hicieron millonarios, ¿quién no vería con buenos ojos este cambio? Nada como utilizar a los ganadores como ejemplo para que todos se olviden de los posibles riesgos.
Detrás del fin del dinero físico no están solo el FMI, la Reserva Federal y numerosos gobiernos, sino también muchas firmas tecnológicas, bancos e importantes figuras públicas, como Bill Gates. Bitcoin, como dinero 100 % digital, puede servir como una excelente publicidad para implementar esta medida.
Los masones
Los masones suelen aparecer en una buena parte de las teorías conspirativas, especialmente en aquellas carentes de fundamento. Quizás por ello sorprenda verlos en esta lista. La cultura popular los ha asociado con un poder en las sombras y sueños de dominación mundial.
Sin embargo, sus fines son a la vez más prosaicos y elevados. Los masones buscan prosperar, mejorar como personas y arreglar su entorno. Esto incluye, entre sus objetivos, la erradicación de la pobreza. De hecho, son conocidos por realizar numerosas donaciones y actos de caridad.
Satoshi Nakamoto posee un millón de Bitcoins, lo que corresponde aproximadamente al 7% del total de la criptomoneda. Es una cantidad importante actualmente, pero que, de alcanzar cifras astronómicas (como el millón de dólares por BTC), podría utilizarse para erradicar la pobreza en el mundo.
PayPal
PayPal revolucionó la forma en que interactuamos con el dinero en internet, y su historia y filosofía tienen ciertos paralelismos con Bitcoin. En su génesis estaba la intención de eliminar a los bancos como intermediarios, empoderar financieramente a las personas y facilitar transacciones rápidas y sencillas entre usuarios.
Estas ideas están alineadas con los principios de Bitcoin: descentralización, accesibilidad y una mayor libertad económica para los usuarios. Además, los fundadores originales de PayPal, como Peter Thiel, Elon Musk y Max Levchin, poseían conocimientos profundos en programación y criptografía.
Lo que quizás es menos conocido es que PayPal llegó a plantearse la creación de una moneda digital propia. Sin embargo, esta idea fue descartada debido a las complicaciones regulatorias y a la oposición abierta de gobiernos y bancos centrales. Esto nos lleva a una pregunta intrigante: ¿podría ser que PayPal hubiera creado Bitcoin fuera de su estructura empresarial para evitar conflictos regulatorios?
Si PayPal estuviera detrás de Bitcoin, su intención podría no limitarse únicamente a proporcionar mayor libertad financiera, sino también a influir en el sistema financiero global. Desde la aparición de Bitcoin, los bancos y gobiernos han perdido el monopolio sobre el dinero. La creación de una moneda descentralizada podría haber sido el primer paso para redibujar el panorama económico mundial. Esto no solo estaría en línea con las ambiciones globales de los fundadores de PayPal, sino que también nos lleva a la pregunta más inquietante de todas:
¿Y SI BITCOIN FUERA UN ARMA?
Si Satoshi Nakamoto no está muerto ni ha perdido sus claves, hay una pregunta que todos deberíamos hacernos: si nunca ha vendido sus bitcoins, ni siquiera cuando pudo hacerse millonario, ¿cuándo piensa hacerlo? Y si no es el dinero lo que le motiva, entonces, ¿qué le mueve?
Para el año 2050, ese 7% de los bitcoins podría alcanzar un valor de entre 5 y 10 billones de dólares. Si esa cantidad se pusiera en circulación a través de un intercambio de criptomonedas en un solo día, el precio del bitcoin se desplomaría más de un 1000% con tal velocidad que provocaría un colapso total en todas las divisas del mundo.
El crack de 1929, la crisis inmobiliaria o la del coronavirus parecerían un juego de niños en comparación con un evento de tal magnitud. Todas las transferencias económicas tendrían que cancelarse durante días, y los negocios, incluidos los esenciales, se verían obligados a cerrar, ya que el precio de venta de los productos sería cien veces menor que el precio al que se adquirieron. Aún más preocupante es que, para 2050, muchos países podrían haber eliminado el dinero físico, lo que agravaría aún más el colapso.
Si un país u organización buscara asestar un golpe mortal al capitalismo para forzar un cambio de régimen, esta sería una jugada maestra. Por ello, independientemente de que hayas comprado o no bitcoins, deberías plantearte: ¿Quién es Satoshi Nakamoto?