Yokai, un nombre que desde tiempos inmemoriales ha aterrorizado a los japoneses. Fantasmas, demonios y espíritus sobrenaturales que mezclan partes animales, humanas y espirituales.
Los yokais son al mismo tiempo dioses y demonios japoneses. Puede que desde la mentalidad occidental estas criaturas nos resulten extrañas. Pero es esta ambigüedad lo que los hace tan característicos y terroríficos a los yokais.
Los hay que ofrecen su amor y protección, mientras que otros causan el mal o claman venganza. Unos viven alejados de los seres humanos y otros habitan en las casas haciendo travesuras o protegiendo a la familia.
Su origen se remonta al sintoísmo. Una religión que venera la naturaleza, con un panteón de millones de pequeños dioses protectores y espíritus malignos que habitan en el bosque: los Yokai.
Estos monstruos japoneses cobran a día de hoy una nueva relevancia gracias al cine, el manga o los videojuegos. Se los puede ver en series tan conocidas como Dragon Ball, One Piece o Pokemon. También en las sagas Final Fantasy o Ghost of Shurima.
Es por eso que nombres como Kappa, Tengu o Kitsune, quizás te suenen. Pero, ¿conoces su historia? ¿Sabes hasta qué punto son peligrosos? ¿Cuáles son los yokais más famosos en Japón?
Rokurokubi
Los yokais que no saben que lo son
Estos siniestros yokais actúan como mujeres normales durante el día, muchas de hecho tienen familias, pero al caer la noche se transforman en Rokurokubi. Su cuello se estira hasta adquirir el tamaño de una boa constrictor. Como estas, envuelve a sus víctimas para devorarlas.
Cualquier mujer podría ser una Rokurokubi sin saberlo, pues la mayoría viven sus actos como una pesadilla. La única pista son extraños sueños donde ven su cuarto desde ángulos imposibles para un ser humano. Siendo la condición de Rokurokubi más una maldición que una criatura per se.
En las historias de terror japonés, las mujeres que se transforman en Rokurokubi son todo un clásico. Es por esto que se han convertido en uno de los yokais más famosos de la mitología japonesa.
Tengu
Los yokais de las montañas
Los tengu son criaturas antropomórficas con grandes garras rapaces. En sus representaciones pictóricas, suelen tener dos aspectos en función de si son buenos o malos. Con cara roja, larga nariz y un bigote negro, los buenos, y con pico alargado los malvados.
Los tengu son una clase de yokai que viven en las montañas, capaces de provocar terribles tormentas con sus alas. También son famosos por secuestrar niños y ancianos a los que devuelven si se los alimenta con pescado o mochi (un dulce típico japonés).
Gracias a la multitud de pinturas en las que aparecen, los tengu están entre los yokais más famosos de la mitología japonesa.
Yuki Onna
El terror japonés tiene forma de mujer
Yuki Onna, la mujer de nieve en su traducción más literal, es un claro ejemplo del terror japonés y la ambigüedad de los yokais. Una mujer hermosa, atractiva y delicada, pero con una mirada que hiela la sangre.
Gracias a su piel tan blanca como la nieve, Yuki Onna se camufla entre las tormentas de hielo atrapando a los incautos. Los cuerpos de sus víctimas aparecen congelados con una expresión de horror tras ver sus ojos.
Keukegen y Akaname
Los yokais que viven en las casas sucias
La limpieza doméstica es muy importante en Japón, tanto que existen dos yokais dispuestos a invadir tu casa: Keukegen y Akaname. Pese a no ser conocidos en occidente, están entre los yokais más famosos de la mitología japonesa.
El keukegen es una especie de perro lanudo que camina a dos patas y que va soltando polvo a su paso. Aunque su aspecto le hace parecer gracioso y adorable, verlo es presagio de muerte y enfermedad. Es por culpa del keukegen que en Japón no tienen como mascota a perros con mucho pelo.
Al contrario, el akaname, si bien tiene un aspecto mucho más repulsivo, su visión es menos peligrosa. Este pequeño yokai, del tamaño de un mono, habita en los baños húmedos, descuidados y llenos de hongos.
Como los limpiafondos de las peceras, el akaname se alimenta de la suciedad del baño. Con su lengua larga y viscosa succiona toda la mugre mejor que el KH7. Por desgracia, dejar que este yokai haga las labores de limpieza no es muy recomendable, ya que acabará por atraer a otras criaturas menos agradables.
Hitotsume Kozo
El terror de la gente ruidosa
Si eres una persona ruidosa, ten por seguro que Hitotsume Kozo te pegará un buen susto. Pues pese a ser inofensivo, este pequeño dios japonés es muy celoso del silencio.
Se aparece como un monje o niño pequeño, pero con un solo ojo en el centro de su frente y una lengua muy larga. Pese a su aspecto, Hitotsume Kozo protege templos y casas, y actúa de guía para los perdidos. Si te extravías por el bosque, síguelo para volver a casa: eso sí, en silencio.
Onis
El terror japonés cuenta con sus propios ogros y troles
Los onis son monstruos japoneses gigantes, que equivaldrían a los ogros o nuestros troles. Los onis suelen tener la piel roja o azul y unos grandes colmillos y cuernos. Lo normal es verlos armados con una gran maza de hierro.
Los onis son los villanos de multitud de leyendas, no solo del terror japonés, sino también de la épica. Como el coco o el hombre del saco, los japoneses suelen aterrorizar a sus hijos con la idea de que si no se portan bien, un oni se los llevara.
Como podéis ver en el video de la celebración del (Setsubun no Hi), esta idea se lleva muy al extremo. Gracias a la multitud de leyendas en las que aparecen, los onis ocupan el primer puesto entre los yokais más famosos de la mitología japonesa dentro del país nipón.
Tsukumogami
Terror japonés de andar por casa.
Los Tsukumogami son una clase muy particular de yokai. Se tratan de objetos usuales del hogar que al cumplir cien años cobran vida. Entre los más famosos están los karakasa (paraguas), Biwa-bokuboku (instrumentos musicales), Ungaikyo (espejos), Zorigami (relojes) y las katanas.
Kappa
El yokai más famoso
En todo el mundo, el Kappa es el yokai más conocido de la mitología japonesa gracias a su aparición en cientos de animes y videojuegos. Tiene forma de tortuga, el cuerpo verde y aletas en las manos y los pies. Vive en lagos y ríos, y suele atrapar a sus víctimas al descuido para ahogarlas bajo el agua como haría un cocodrilo.
Si está en su elemento, luchar contra el Kappa es una misión imposible. Por ello, la única forma de librarse de él es engañarlo para que mire hacia arriba y caiga el agua del cuenco que lleva en su cabeza. Si esto sucede, le vencerá el sueño y podrás escapar.
Kitsune
Historias de amor y terror japonés
El dios zorro Inari es uno de los más venerados en Japón, quizás por ello, los kitsune son uno de los yokais más famosos de la mitología japonesa. Zorros de hasta nueve colas (a más colas más poder) que pueden transformarse en bellas mujeres.
Al igual que los zorros, los kitsune son adorables y peligrosos. Son miles las leyendas de hombres que se enamoraron de kitsunes, se casaron con ellas e incluso tuvieron hijos. Pero la mayoría de estas historias suelen acabar en tragedia cuando se descubre el pastel.
Otros son directamente atacados o poseídos por ellos. Abundan también los relatos donde, tras una noche de pasión, la víctima amanece desnuda y desorientada en mitad del bosque. Solo la hostilidad de los perros hacia estas bellas mujeres pueden delatar a un kitsune.
El famoso grupo de Heavy Babymetal, les dedicaron un tema en su famosa canción Megitsune.
Bakeneko y nekomata
El terror japonés tiene nombre de gato
Los gatos son una parte muy importante de la cultura japonesa y se los venera en los templos como dioses. De hecho, el famoso gato de la suerte (Maneki-Neko) no es chino, sino japonés. Sin embargo, cuando un gato aparece en una historia de terror japones la cosa se pone muy turbia.
En el año de 1602, se decretó en Japón que todos los gatos debían ser puestos en libertad para controlar la población de ratas. Esto generó miles de gatos callejeros y leyendas en torno a ellos. Las dos más famosas son las de los bakeneko y los nekomata.
Los bakeneko (gato monstruoso), son enormes felinos de varias colas que tienen la capacidad de hablar y pueden cambiar de forma. Sin embargo no pueden hacerlo a voluntad, por ello dan caza a los humanos, los devoran y usurpan su identidad .
El nekomata es aún más siniestro. Estos peligrosos gatos de dos colas, tienen la capacidad de controlar a los muertos como lo haría un nigromante. Si cogen ojeriza a un humano, desentierran a su último familiar muerto y lo mandan contra su víctima.
Para evitar que surgiera un baneko o nekomata, durante siglos, los japoneses adoptaron por costumbre cortarles la cola a los gatos. Así se evitaban que el apéndice se duplicará y se convirtieran en yokais capaces de devolver a los muertos a la vida.
Libros sobre yokais y leyendas japonesas
El mundo de los yokais es tan variado y extenso que es imposible mencionarlos a todos. El folclore japonés es uno de los más amplios del mundo, haciendo especial hincapié en el terror y las leyendas urbanas.
Si te interesa la mitología japonesa, hay varios libros sobre el tema: Mitología japonesa de Masaharu Anesaki. Yokai. Monstruos y fantasmas en Japón de Andrés Pérez y Chiyo Chida o Cuentos tradicionales de Japón de Richard. G. Smith.
¿Conocías alguno de estos yokais o demonios japoneses? ¿Tendrías una relación con un kitsune? ¿Cuál es tu yokai favorito? ¿Cuál te da más miedo? Si te gustan las leyendas e historias de terror japonés no olvides suscribirte al blog. ¡Espero tus comentarios y opiniones!
Los Kitsuné son sin duda mis favoritos.
Muchas gracias Sara.
Un artículo de los mejores sobre el terror japonés. Lo recomiendo mucho
Este escritor tiene muh buenas redacciones y sus artículos están muy bien elaborados
Muchas gracias Antonio,